El campo es el origen y se seleccionan aquellos árboles que proporcionarán cada campaña los mejores frutos, en función de la climatología, del terreno, se elige el momento preciso de recolección, con la temperatura adecuada, procurando que el fruto no sufra erosión ninguna y sea trasladado a la almazara en horas, en las mejores condiciones, para su molturación al momento, conservando así todas sus propiedades intactas.
Incorporando nuevos productos biodinámicos y aportando la innovación para que el proceso, siguiendo las normas de la tradición, llegue intacto a la almazara.